Preparar la defensa oral en las oposiciones docentes: guía de una experta

La defensa oral de las oposiciones docentes es la prueba en la que el tribunal valora si, además de dominar la teoría, sabes llevarlo a la práctica en el aula.

En Inspira Preparadores vemos cada año cómo una defensa oral bien trabajada permite que programaciones, propuestas pedagógicas o unidades de programación didáctica excelentes brillen ante el tribunal. No se trata de saber más, se trata también de saber defender con claridad, seguridad y sentido docente todo el trabajo que ya has hecho.

Soy Sonia Pérez, especialista en la preparación de la defensa oral en Inspira Preparadores, y en esta guía te explico qué es y cómo preparar la defensa oral de las oposiciones paso a paso, con un enfoque práctico adaptado a los criterios del tribunal.

¡Si quieres prepararte con Inspira, da el paso!

¿Qué es la defensa oral en las oposiciones?

La defensa oral es el momento en el que el tribunal deja de ver papeles y empieza a verte a ti: tu forma de transmitir, enseñar, de pensar el aula y de conectar con el alumnado. Es cuando tu vocación y tu criterio docente toman voz.

En esta exposición demuestras:

• Que dominas tu propuesta de trabajo
  
  

• Que tomas decisiones pedagógicas justificadas
  
  

• Que existe coherencia entre objetivos, metodología, evaluación e inclusión
  
  

• Que tienes capacidad de comunicación, seguridad y criterio profesional

Mi recomendación: piensa la defensa como una clase para adultos expertos; no expliques “qué pone” en tu programación o propuesta, sino por qué has tomado cada decisión.

¿Por qué es clave para la nota final?

Porque es la prueba en la que el tribunal conoce tu manera de dar clase y decide si tu propuesta es simplemente correcta o realmente valiosa.

Aquí se valora especialmente: cómo defiendes y justificas tus ideas, la coherencia pedagógica de tu propuesta, tu seguridad y claridad al comunicar y el perfil docente que proyectas como futuro profesional

Una buena defensa puede elevar notablemente la nota; una defensa poco trabajada puede hacer que un buen documento pase desapercibido.

Mi recomendación: asume que el tribunal ya ha leído muchos documentos parecidos; tu defensa es lo que hace que la tuya destaque.

La defensa oral no se lee: ¿cómo construir un discurso docente?

Uno de los errores más frecuentes en la defensa oral es convertirla en una lectura resumida del documento. La defensa no es un índice hablado, sino un discurso docente con sentido, coherencia y criterio pedagógico.

Antes de empezar a ensayar, es fundamental tener claro el mensaje que quieres transmitir. Para ello, conviene preguntarse:

• ¿Qué tipo de docente quiero mostrar al tribunal?

• ¿Cuál es el hilo conductor de mi propuesta educativa?

• ¿Cual es la realidad del entorno y cómo de adapto al contexto educativo?

Cuando estas ideas están claras, el discurso fluye con mucha más naturalidad y seguridad.

Las defensas mejor valoradas por el tribunal suelen compartir una estructura reconocible y bien construida. En ellas aparecen siempre seis pilares fundamentales: una introducción y un cierre bien trabajados, una exposición de los diferentes elementos curriculares y explicación de los métodos pedagógicos empleados,  la presentación de actuaciones de aula realistas que atiendan a diferentes situaciones de aprendizaje y demuestran que la propuesta es aplicable al día a día del aula, una atención a las diferencias individuales que de respuesta a la diversidad del aula, así como una evaluación clara y coherente.

Mi recomendación: trabaja la propuesta atendiendo a aquello en lo que crees, esto te hará más fácil explicarlo y transmitirás seguridad y confianza en tu trabajo.

Estrategias para ensayar la defensa oral

Ensayar la defensa oral no es repetir el discurso sin más, sino entrenar con intención y estrategia. Los primeros minutos son especialmente importantes, ya que concentran los nervios y marcan la primera impresión del tribunal.

Cada ensayo debería tener un objetivo concreto: mejorar la fluidez, ajustar los tiempos, eliminar muletillas, clarificar la explicación a través de un hilo conductor que tenga sentido y englobe toda la propuesta o trabajar la comunicación no verbal. Ensayar con foco permite avanzar en cada repetición y aprovechar mejor el tiempo.

El inicio y el cierre son los momentos que más recuerda el tribunal. Un comienzo potente puede partir de una idea pedagógica clara, de una breve situación real de aula o de una frase que defina tu identidad docente. El cierre debe reforzar el mensaje y dejar claro tu enfoque profesional: esta es mi forma de enseñar y así impacta en el alumnado.

Mi recomendación: ensaya la introducción todos los días, hasta que salga natural incluso en situaciones de nervios.

Gestiona los nervios

Los nervios no se eliminan, se gestionan con entrenamiento. Muchos opositores empiezan tensos, pero se sueltan tras los primeros minutos cuando el inicio está bien trabajado.

Errores frecuentes en la defensa oral que debes evitar

Algunos fallos habituales pueden restar mucha fuerza a una buena defensa. Conviene evitar especialmente:

• Usar un lenguaje coloquial y poco profesional

• Dar poca importancia a la comunicación no verbal

• No saber justificar las decisiones pedagógicas

• Incoherencia a la hora de vincular la programación o propuesta pedagógica con la unidad de programación didáctica

• Hablar demasiado rápido

• Ignorar los criterios oficiales de la convocatoria, es decir, dejarse apartados sin mencionar.

• No tener presente el tiempo

Mi recomendación: pauta los tiempos de cada apartado, ensaya con el reloj que vas a llevar ese día y fíjate en ello cuando estés en el examen oficial, esto te dará seguridad y tranquilidad.

En Inspira te preparamos una defensa oral auténtica

Preparar la defensa oral de las oposiciones no es repetir un texto, sino transformar tu trabajo en un mensaje claro, convincente y humano. Cuando conectas lo que haces con por qué lo haces, el tribunal lo percibe. Y ahí es donde marcas la diferencia.

Mi recomendación: rodéate de preparadores que te enseñen a defender como docente, no solo a cumplir un guión.

¡Marca la diferencia con Inspira Preparadores!